Los coches eléctricos son cada vez más baratos de reparar

¿Se están equiparando las reparaciones entre coches de combustión y eléctricos? ¿Cuánto cuesta una reparación? Lo vamos a ver en este post. 

Lo cierto es que uno de los argumentos más habituales que se esgrimen en contra de los vehículos eléctricos tiene que ver con el coste de sus reparaciones. 

Y no es raro escuchar que si alguna vez falla la batería, la factura puede alcanzar cifras de varios miles de euros. 

Esta percepción, que se ha instalado en la cultura popular, actúa como freno para muchas personas que consideran pasarse a un coche sin emisiones.

Sin embargo, los datos reales pintan un panorama bastante más alentador. 

Y es que cuando se trata de reparaciones, los vehículos eléctricos (VE) no son tan distintos de sus equivalentes de combustión interna. 

Así lo confirma Mitchell, una compañía especializada en soluciones tecnológicas para el sector asegurador del automóvil. 

Según su informe EV Collisions Insight Report 2024, el coste medio de reparar un eléctrico en Estados Unidos fue muy similar al de los coches de combustión tradicional o incluso a los híbridos enchufables (PHEV).

"Los vehículos de combustión pura (ICE) más modernos estuvieron igualados con los VE y PHEV (híbridos enchufables) en el ámbito de los costes de las reparaciones", destaca la empresa en su estudio.

Además, los costes no solo se han mantenido, sino que han registrado un leve descenso. El año pasado, el precio medio de las reparaciones de coches eléctricos disminuyó un 3 por ciento respecto al año anterior. 

Siniestralidad y frecuencia de accidentes: ¿más o menos que en los coches tradicionales?

Aquí también hay cifras interesantes. La frecuencia de siniestros totales en los eléctricos subió ligeramente, pasando del 8  por ciento al 10,2  por ciento. 

Esta subida se debe, en parte, al incremento récord en las ventas de este tipo de vehículos durante el último año. En cuanto a los siniestros reparables, el porcentaje se situó en un 2,71  por ciento.

¿Y qué pasa con el mantenimiento periódico?

Aquí es donde los eléctricos sacan verdadera ventaja. Tú, como posible comprador, debes saber que estos vehículos prescinden de muchos de los elementos que requieren mantenimiento habitual en los coches de combustión. 

No hay aceite que cambiar, ni filtros, ni correas de distribución, ni embrague. Eso, por no hablar de los frenos, que sufren un menor desgaste gracias al sistema de frenada regenerativa.

Esta característica no solo reduce las visitas al taller, sino también el gasto asociado al mantenimiento preventivo. Y si a esto le sumas los menores costes en combustible y posibles ayudas fiscales, la ecuación empieza a inclinarse claramente a favor del vehículo eléctrico.

Es lógico que te plantees muchas preguntas antes de dar el salto a la movilidad eléctrica. Pero los datos están ahí: los costes de reparación están en descenso, la frecuencia de siniestros no es alarmante y el ahorro en mantenimiento es tangible. Lo que parecía ser un argumento en contra, empieza a desmoronarse ante la evidencia.

Por supuesto que si nos fijamos en el tema seguros tampoco vas a tener ningún problema. Solo tienes que acercarte a nuestro comparador de coche y moto y verás que las mejores compañías aseguradoras del momento están ofreciendo precios realmente competitivos. Si necesitas un seguro para tu coche eléctrico o coche de combustión no dejes de visitar este portal.