Conducir con niebla
es peligroso. Posiblemente sea la inclemencia meteorológica que más accidentes
causa por falta de una buena visibilidad.
Además, muchos conductores no saben cómo utilizar convenientemente la luces anti niebla que en todo
vehículo existen.
Así que en este post vamos a darte una serie de consejos para que circules
seguro en caso de niebla y evitar accidentes de coche.
Existe la creencia que si te pegas al coche de delante lo
verás mucho mejor. Esto es un grave
error. Has de tener en cuenta que la niebla provoca humedad y que el asfalto
también suele estar mojado. Por
tanto su capacidad de frenado es menor. Mantén la distancia de seguridad de la
misma forma que lo haces en un día soleado.
Otra creencia generalizada es que tenemos mejor visión si
ponemos las luces largas. Pero en contra de lo que podría ser considerado
lógico, las luces largas se reflejan en
la niebla y siempre se tiene menos visibilidad. Eso sin contar
evidentemente que vas a molestar a los
conductores que circulan en sentido contrario.
Lo más conveniente es
poner las luces de cruce y de posición independientemente de la densidad
que pueda tener el banco de niebla.
Y, por supuesto, utilizar las antiniebla, que para eso
precisamente han sido creadas. Proyectan una luz que hace que no rebote en la
niebla. Por eso se encuentran debajo de la zona de parachoques.
La luz antiniebla delantera la puedes utilizar si lo consideras conveniente. Pero la trasera sólo la debes encender en caso
de niebla muy densa con el objetivo que te vean los coches que circulan por
detrás de ti.
Si observas que molestan apágalas. Jamás se deben utilizar
en un atasco. Aunque lo más importante es siempre la
seguridad, piensa que la mala utilización de las luces también conlleva
multas.
En muchas zonas de España los bancos de niebla son
habituales en determinadas horas del día durante el otoño y el invierno. Aunque
creas que te conoces el camino al dedillo jamás
bajes tu nivel de alerta porque las condiciones de la carretera están en
constante cambio.
Piensa que en los trayectos cortos se producen muchos accidentes porque estamos más
relajados.
Tampoco tienes que aumentar la velocidad para salir cuanto
antes del blanco de niebla. Muchos conductores lo hacen debido a su nerviosismo observando que la circulación es lenta.
Hay que adecuar la velocidad a las condiciones de la
carretera. Y este consejo sirve para cualquier inclemencia meteorológica. Usa
el acelerador de manera moderada y procura que las frenadas siempre sean
suaves. Te volvemos a recordar que con niebla el piso está mojado.
Hay otros muchos conductores que, con buen sentido, paran su
marcha y esperan que despeje el banco de niebla. No es mala solución.
El error viene cuando
paramos en un arcén, ya sea de una carretera, autovía o autopista.
Esto es sumamente peligroso porque pueden sucederse choques
por alcance debido siempre a la mala visibilidad y a que se reducen los
segundos de reacción. Si decides parar busca un estación de servicio o una zona
muy segura que no ponga en peligro al resto de conductores.
Como nos encontramos ante una falta evidente de visibilidad
a veces ocurre que invadimos el carril
contrario sin darnos cuenta. Suele suceder y esto es muy peligroso porque
podemos provocar una colisión frontal, la más peligrosa que existe. Así que
presta mucha atención a esta circunstancia.
Hemos querido darte en este post una serie de consejos para
que no tengas ningún percance si conduces en un banco de niebla. Mantente
siempre alerta ante este fenómeno meteorológico y conduce con mucha precaución
haciendo siempre un buen uso de las luces de tu coche.
¿Sigues todos estos
consejos cuándo te encuentras con un banco de niebla? ¿Nos darías alguno
consejo más? No dudes en compartir este post a través de tus redes sociales y
hacernos llegar tus opiniones. Estaríamos encantados de que lo hicieras.