¿Eres de los que piensa que cuando hay un accidente de tráfico es la Seguridad Social la que se hace cargo de todos los gastos? ¿De qué se hacer cargo el seguro de coche? ¿Sabes que le puede costar al Sector Seguros los siniestros viarios?
Vamos a contestar en las próximas líneas a todas estas preguntas. Pero nos gustaría, aquí en Seguro Joven, empezar contestando la tercera que hemos formulado.
Según unas cifras que hemos recogido de Unespa, la patronal del Seguro, en el año
2023, el coste de la asistencia
sanitaria a los implicados en accidentes de tráfico alcanzó los 387 millones de euros.
Mientras, en el año 2022, y esta vez según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), los gastos relacionados con las víctimas de accidentes de tráfico en España ascendieron a 7.724 millones de euros.
Este cálculo incluye tanto a las personas fallecidas como a las heridas, hospitalizadas y no hospitalizadas, en siniestros viales. Estos datos proporcionan una idea clara del impacto económico que los accidentes tienen en la sociedad.
Como ves, cuando un conductor sufre un accidente de tráfico, muchas personas todavía creen que es la Seguridad Social la que va a cubrir todos los gastos médicos.
Sin embargo, esta
idea es errónea. La realidad es diferente.
Es cierto que la Seguridad Social brinda atención médica a las víctimas de accidentes. El sistema público, en este sentido, el de las urgencias es todo un ejemplo de profesionalidad.
No obstante, el coste
de estos servicios no lo absorben las arcas públicas.
Entonces, ¿quién se hace cargo? Ya lo puedes ir adivinando.
Son las aseguradoras quienes deben asumir estos gastos y más en concreto la compañía
aseguradora del responsable del accidente.
Este es uno de los motivos por los cuales las aseguradoras tienen convenios tanto con hospitales públicos como privados, permitiendo una cobertura adecuada para los siniestros.
La legislación española establece que todos los conductores deben contar con un seguro de responsabilidad civil.
Este tipo de póliza es fundamental, ya que en caso de un accidente, cubre los daños causados a terceros, incluyendo tanto daños materiales como personales.
Sin esta póliza obligatoria, las consecuencias económicas para el conductor serían muy elevadas, como es fácil de entender.
Además, la mayoría de los seguros de coche suelen incluir coberturas que protegen al conductor en caso de sufrir daños corporales, incluso si es el responsable del accidente.
No obstante, no todos
los seguros son iguales, y existen diferencias en las coberturas.
Algunos ofrecen una póliza específica conocida como seguro del conductor, que es una protección esencial para quien está al volante.
Esta cobertura se extiende tanto si el conductor es culpable como si no, e incluso cubre accidentes sin la intervención de terceros.
Es siempre muy interesante que cuando vayas a contratar un seguro de coche revises detenidamente las condiciones del contrato.
Muchas veces, se pasa por alto qué tipo de coberturas están incluidas, lo que puede derivar en problemas al momento de necesitar asistencia.
La respuesta a esta pregunta que te acabamos de formular es que no. No siempre están obligadas a hacerlo.
¿En qué casos se pueden negar a asumir los costes? Pues por ejemplo:
· Cuando el coche no haya pasado la ITV
· Cuando no se disponga del seguro de coche en vigor
· Cuando se haya conducido bajo los efectos del alcohol o las drogas
Es decir, cuando el conductor responsable del accidente comete una negligencia o incumple la ley. O ambas cosas. En estos casos, como se ha incumplido la ley, la aseguradora no se va a hacer cargo de los costes de la asistencia sanitaria.
En aquellas situaciones en las que el conductor responsable del accidente no esté asegurado o no se logre identificarlo, es el Consorcio de Compensación de Seguros quien toma las riendas.
Esta entidad, creada para estos casos excepcionales, y única en el mundo, es la encargada de asumir los costes de los daños y de indemnizar a las víctimas cuando sea necesario.
El Consorcio es una herramienta que ofrece tranquilidad a las víctimas en circunstancias complejas, asegurando que no queden desprotegidas frente a estos casos.
En conclusión, aunque la Seguridad Social presta la atención médica necesaria tras un accidente de tráfico, no es la responsable de cubrir los gastos derivados.
Las aseguradoras desempeñan un papel fundamental en este proceso, protegiendo tanto a las víctimas como a los propios conductores.
Es vital que los usuarios de vehículos comprendan la importancia de contar con un seguro adecuado, no solo para cumplir con la ley, sino también para garantizar su protección personal en caso de accidente.