El número de muertos en carretera a lomos de una motocicleta o ciclomotor se redujo en los últimos 20 años en más de un 60 por ciento después de pasar de cerca de 950 muertos anuales en accidentes de este tipo de vehículos a principios de los años 90 a poco más de 350 que se registran hoy en día en España, un 63 por ciento menos.
Sin embargo, a pesar de este importante descenso del número de víctimas mortales, el cómputo general de víctimas marca una cifra muy similar al que se registraba en los años 90 cuando anualmente 28.000 motoristas o acompañantes se veían afectados por un accidente dentro o fuera de ciudad, aunque a principios de la década del 2000 se llegó a superar incluso las 40.000 víctimas anuales.
La principal razón de que se haya mantenido el número de víctimas habiendo descendido el número de muertes la encontramos en el notable aumento de heridos en accidentes de motocicletas que ha ido incrementándose gradualmente de los aproximadamente 13.000 lesionados en el año 1993 a los más de 20.000 que se registraron en el año 2013.
Muy positiva fue por el contrario la cifra de fallecidos en motocicleta en el mismo periodo donde el número de víctimas mortales se redujo a casi la mitad pasando de 587 decesos en 1993 en accidentes de estos vehículos a los 301 que acumuló el pasado año.
En lo que a ciclomotores se refiere, las tendencias de siniestralidad son notablemente diferentes a las de las motocicletas de mayor potencia, pues el número de heridos ha descendido en torno un 50 por ciento teniendo en cuenta que a principios de los años 90 el volumen de lesionados era de en torno a 14.000 anuales, cuando en la actualidad este concepto rebaja los 8.000 heridos cada curso.
Pero es sin duda el número de víctimas mortales en accidentes de ciclomotor el dato que más positivo resulta en el periodo analizado, pues en la actualidad tan solo fallecen el 10 por ciento de los que llegaron a perder la vida en estos accidentes en algún año del pasado siglo cuando en 1999, por ejemplo, fueron 515 los muertos en estos vehículos, cuando hoy en día son tan solo 54 las víctimas.
En consonancia con los buenos datos de las últimas dos décadas, el último año resultó también positivo para los conductores y acompañantes de las dos ruedas, pues aunque fue un descenso pequeño, se consiguió rebajar el número de víctimas mortales hasta los 355 de los 369 del año anterior.
Como es lógico, este descenso viene motivado por sendas bajadas de víctimas mortales tanto en accidentes de ciclomotor como en accidentes de motocicletas, pues en el primero de los casos este descenso se tradujo en 12 fallecidos menos, siendo 2 fallecidos menos cuando hablamos de motocicletas. En cualquier caso, cabe destacar que tanto el número total de muertos teniendo en cuenta a ambos tipos de vehículos, como el que diferencia entre moto y ciclomotor marcó mínimos históricos desde que se tienen registros.
Fuente: Segurojoven.com