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Todo lo que debes saber sobre las balizas de peligro
¿Quieres saberlo todo sobre las nuevas balizas de peligro que serán obligatorias en 2026? ¿Que modelos existen y qué características tienen?
Con el propósito de mejorar la seguridad vial y adaptarse a los avances tecnológicos, la Dirección General de Tráfico (DGT) cambiará los dispositivos de preseñalización de peligro.
Se reemplazarán los tradicionales triángulos de emergencia por modernas balizas luminosas de color amarillo que estarán conectadas con la plataforma DGT 3.0.
El objetivo es advertir en tiempo real a los demás conductores sobre la ubicación exacta de un vehículo detenido, reduciendo así el riesgo de accidentes.
Para su correcto uso, el dispositivo deberá guardarse en la guantera del vehículo y, en caso de emergencia, colocarse en el techo.
La DGT ha publicado un listado oficial con los modelos homologados que cumplen con los requisitos de conectividad exigidos.
Desde el año 2023, existen en el mercado balizas luminosas que carecen de conexión a la plataforma DGT 3.0.
Aunque actualmente están permitidas, es importante tener en cuenta que, a partir del 1 de enero de 2026, únicamente estarán autorizadas aquellas balizas que dispongan de esta conexión.
Por ello, desde la propia web de la DGT se aconseja adquirir dispositivos que ya estén integrados con la plataforma digital, ya que estos son capaces de "comunicar la activación, desactivación y geoposicionamiento de la señal al punto de acceso nacional en materia de tráfico y movilidad".
Más allá del cumplimiento normativo, las balizas con conectividad ofrecen beneficios significativos.
Una de sus principales ventajas es la capacidad de enviar información directamente a los sistemas de navegación incorporados en los vehículos modernos.
De este modo, los conductores reciben alertas inmediatas sobre peligros en la vía, mejorando la capacidad de reacción ante situaciones imprevistas.
Para aquellos automóviles que no cuentan con sistemas de navegación avanzados, la información seguirá mostrándose a través de los paneles de mensaje variable ubicados en las carreteras, garantizando así que todos los usuarios tengan acceso a las alertas de seguridad vial.
Desde la DGT también se advierte sobre la proliferación de modelos que, si bien se anuncian como conectados, no cuentan con la certificación oficial.
Para evitar confusiones y posibles fraudes, se recomienda consultar el listado de dispositivos homologados disponible en la página oficial del organismo.
En cuanto al precio, la mayoría de estas balizas conectadas tienen un coste aproximado de 50 euros.
Otro aspecto destacado de estas nuevas balizas luminosas es que incluyen un plan de datos con una duración de 12 años.
Durante este periodo, no será necesario abonar ninguna cuota adicional, lo que representa un ahorro considerable para los usuarios.
Sin embargo, todavía no se ha determinado qué ocurrirá una vez finalice este plazo en el año 2038. Queda por aclarar si será necesario adquirir un nuevo dispositivo o si bastará con renovar el plan de datos existente.
Este cambio impulsado por la Dirección General de Tráfico representa un avance significativo en la forma en que se gestiona la seguridad en carretera.
Las balizas conectadas no solo permiten una respuesta más ágil y eficaz en situaciones de emergencia, sino que también integran al conductor en un sistema de movilidad inteligente, donde la información fluye en tiempo real para proteger la vida de todos los usuarios de la vía.
A medida que se acerca la fecha límite de enero de 2026, es importante que tomes conciencia de la necesidad de actualizar tu equipo de emergencia. Apostar desde ya por un modelo homologado y conectado no solo es una cuestión de legalidad, sino también de responsabilidad y previsión.
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