
¿Qué porcentaje de víctimas en carretera han consumido alcohol y drogas? ¿Qué efectos tienen estas sustancias en la conducción? Lo vamos a ver en este post
En 2024, casi la mitad de los conductores fallecidos en accidentes de tráfico en España habían consumido alguna sustancia tóxica, según revela el informe Hallazgos toxicológicos en víctimas mortales de accidentes de tráfico, elaborado por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses.
El dato concreto alcanza el 48,2 %, una cifra preocupante que pone de manifiesto la persistencia del consumo de sustancias al volante.
Entre las sustancias detectadas, el alcohol se mantiene como la más común entre los fallecidos, seguido de la cocaína y el cannabis.
De hecho, de todos los conductores que dieron positivo en algún tipo de sustancia, el 71,2 % lo hicieron exclusivamente por alcoholemia.
Este porcentaje representa un ligero incremento del 1,6 % respecto al año anterior. En contraposición, el consumo de drogas ha experimentado un descenso del 6,3 %, retrocediendo a niveles similares a los registrados en 2017.
Un aspecto especialmente alarmante es la gravedad de las intoxicaciones etílicas detectadas.
La mayoría de los conductores fallecidos que dieron positivo por alcohol presentaban tasas superiores a 1,20 gramos por litro, lo cual indica un grado de intoxicación muy elevado, con consecuencias directas sobre la capacidad para conducir de manera segura.
En cuanto al perfil de las víctimas con resultados toxicológicos positivos, el 92,7 % eran hombres.
En lo que respecta a la edad, el 46,3 % de los fallecidos con tasas de alcoholemia superiores al límite legal se encontraban entre los 25 y los 54 años, una franja de edad que agrupa a los conductores con mayor presencia en las carreteras.
El audiovisual elaborado por Umivale Activa expone con claridad cómo el alcohol interfiere directamente en las capacidades psicofísicas necesarias para una conducción segura. Entre los principales efectos negativos se encuentran:
Menor percepción del riesgo: El conductor se muestra más temerario y toma decisiones imprudentes.
Alteraciones visuales: Se dificultan la interpretación de señales, el cálculo de distancias y la adaptación a los cambios de luz. También puede aparecer la llamada "visión en túnel".
Disminución del tiempo de reacción: Los reflejos se ralentizan y aumenta la probabilidad de cometer errores graves.
Problemas de coordinación: Se producen movimientos imprecisos y se pierde el equilibrio, algo crucial al manejar un vehículo.
Los datos y testimonios recogidos reflejan que el consumo de alcohol al volante sigue siendo uno de los principales factores de mortalidad en accidentes de tráfico.
A pesar de las campañas de concienciación, los controles de alcoholemia y las sanciones, el número de positivos por alcohol no ha disminuido como cabría esperar.
Por ello, resulta fundamental seguir reforzando las políticas de prevención, fomentar la educación vial desde edades tempranas y promover un cambio cultural que rechace rotundamente la mezcla de alcohol y conducción.
Solo mediante un esfuerzo conjunto entre instituciones, empresas y ciudadanía será posible reducir estas cifras y salvar vidas en la carretera.
Así que no bebas cuando conduzcas. Es fundamental que sigas este consejo como también es importante que tengas un buen seguro de coche con amplias coberturas. Si estás buscando tu primer seguro o quieres renovar la póliza que ya tienes harías bien en pasarte por nuestro comparador. Podrás ver las mejores ofertas de las mejores compañías aseguradoras de España